A partir de ahora voy a escribir para unos lectores imaginarios que me pienso inventar.
Al principio van a ser poquitos. Unos 3:
Lisboa, Flácida y moribunda y Aguila blanca.
Son personajes de los cuales no voy a saber absolutamente nada. Ni el sexo, ni la edad, ni el verdadero nombre, ni nada (aunque "flacida y moribunda" es casi seguro que es mujer).
Es mas, van a escribir comentarios (que por supuesto voy a escribir yo) y yo les voy a responder (y por supuesto...también les voy a escribir yo). Al principio va a ser muy "familiar" y los comentarios van a ser de cariño y ánimos. Algunos comentarios de Aguila blanca me sugieren que quiere decirme algo, pero no entiendo que. No tengo sus direcciones de mail.
Esto me recuerda a esa personas solitarias que se escriben a si mismos, o se llaman solos por teléfono y se dejan un mensaje en el contestador.El boca en boca va a hacer que mi blog sea "vox populi" y el número de comentaristas va a ser cada vez mayor.
Mi cerebro cada vez va atener que trabajar con mas amplitud; por que si bien yo "no los conosco" cada uno tiene su personalidad.
Seguramente algunos me caerán bien y otros no tanto.
Algunos serán inteligentes y otros un poco estúpidos. Algunos me van a insultar y me van a decir que estoy loca y otros solamente me van a decir que estoy loca. Algunos estarán de paso, serán "comentaristas de paso", tipo "vi luz y entré". Otros serán fieles a mis letras y a mis tonterías.
Aguila blanca desaparecerá misteriosamente y nunca mas volverá a comentar.
Flácida y moribunda y Lisboa terminarán siendo dos lesbianas reprimidas que se conocen y viven en pareja felizmente dos años después en un barrio del sur de Sevilla.
Meses después el blog se pone de moda entre los estudiantes de psicología. Los comentarios parecen sesiones de diván y ami me gusta leerlos y sentirme identificada. Los mas tremendistas hablan de "ezquizofrenia potencial" y "múltiples personalidades", otros de "loca de remate" y "cabeza de zapallo". Los mas conservadores detestan el blog. Dicen cosas como: "perdí 5 minutos de mi vida en los que podría haber aprendido una nueva función del excel", "sos un insulto a Shakespeare" o "ni Freud podría con vos".
Mi habilidad para relatar las cosas que me pasan (sobre todo por la cabeza) hacen que la gente se enganche y espere ansiosa mi próxima actualización. Algunos dicen conocerme personalmente. Que sospechan que soy yo, pero no se animan a enfrentarme cara a cara. Yo no les creo. Algunos me describen físicamente y puede que tengan razón. La presión por actualizar con posts de buena calidad y con finales abiertos al debate, me carcomen la mente.
En mi trabajo las cosas no funcionan como deberían por que tengo la cabeza metida adentro de blogger.com.
Planteo en un post (el mas leído y comentado del blog) que necesito dejarlo y empezar a hacer de mi vida lo que era ántes: una vida absurda, monótona y aburrida. Los comentaristas enloquecen, Flácida y moribunda deja 37 comentarios en menos de una hora, y Lisboa 15. Los etudiantes de psicología me piden perdón por si alguna vez me ofendieron.
Las opiniones están fuertemente divididas. Algunos creen que debería irme y otros no soportan la idea de que yo deje de escribir.
Entonces corto por lo sano, en un post muy emotivo, saludo a todos con un cálido abrazo de palabras y yo, habiendo conseguido mi propósito, me retiro a domir en paz.