lunes, abril 30, 2007

Sueños beta

Una papada de plastilina. Presiento que de ahora en más voy a tener visiones más extrañas que lo normal antes de conciliar el sueño. Nito Artaza le pasa la lengua a Cecilia Milone. JacksonPollock. JacksonPollock. JacksonPollock.

Romper un silencio así no tiene perdón.

Y un viejo se cae de maduro (cuak).

domingo, abril 29, 2007

Sin lugar

Respirar hondo.

Contener el llanto.

ESTOY CANSADA DE SENTIR VERGÜENZA

Que en mi caso,

es un poco como sentirme culpable de cosas que yo no hice.

La gente habla y habla y habla. Y yo siento que piensan cosas que no dicen. Que prefiero que no digan.

Empiezo a odiar la palabra: "soltera".

"Las solteras por acá. Las que estén en pareja por este otro lado. Vamos chicas...".

Como ganados. ¿O como perdidos?. En fin.

NO ME CLASIFIQUEÍS
NO ME ESTADARICEÍS
PERO PRINCIPALMENTE: NO ME FASTIDIEÍS
Soy fea. Muy fea. Y creo que por eso ningún hombre me da bolilla. Se avergüenzan de mí.
Y yo me siento cada vez peor.
Y cada vez más fea y más fea y más fea.
Vamos a hablar. Yo no te voy a decir nada que ya no sepas. Vos no me vas a decir nada nuevo. Vamos a seguir siendo los mismos infelices de siempre. Pero sin la infantil expectativa de conocernos.

Chucuchuuuu

Me pasé toda la noche tratando de entender porqué la gente en las fiestas hace el "trencito".

¿Porqué?

¿Porqué?

¿Porqué?

¿Serán traumas de la infancia estandarizados? ¿Numéricamente seriados?

sábado, abril 28, 2007

ECLIPSES
Tengo la impresión de que la gente de mi entorno se está empezando a dar cuenta de que estoy muy loca.

Y se asustan,


- Y me asustan -

viernes, abril 27, 2007

"Vive cada segundo de tu vida como si fuera el último"

¡ME VOY A MORIR! ¡ME VOY A MORIR!
NB: al menos así lo viviría yo si supiera que es el último segundo de mi vida.

Brrr

- Entonces busco los zapatos el lunes que viene - le digo queriendo terminar la conversación al zapatero.

- Si, el lunes.

El hombre se queda un rato cavilando a mitad de camino entre el mostrador y la puerta.

- Si, el lunes los busco.

- Si.

- Si.

- Si, el lunes vení a buscarlos.

- Si.

Ya estoy al lado de la puerta y el viejo no se decide a abrirme.

- Bueno, entonces el lunes vengo a buscarlos, así tiene tiempo de limpiarlos también - digo como queriendo ponerle de una puñetera vez punto final a la charla -

- Claro, vení el lunes así te los limpio con ese material que me van a traer de Buenos Aires que es mucho mejor que el que se consigue acá. Porque el que yo tengo no te va a servir de mucho: no es de buena calidad. Yo no quiero arruinarte esos zapatos, son buenos. Mejor esperá hasta el lunes así te los dejo "pipí cucú".

- Está bien. Entonces los vengo a buscar el lunes de la semana que viene - le digo ya un poco irritada.

- Si, el lunes. No te olvides de traer la boletita esa que te dí, porque sino no voy a poder dartelos. Nosotros nos manejamos con esas boletitas porque ultimamente hay tanto trabajo ¡y si no fuera por las boletitas, se nos armaría un lío!. Mi mujer maneja todo esa papeleta y si no tengo todo al día después me agarra y me reta. Así son las brujas...hahaha...

- Claro...- me rasco la cabeza y tratando de ser amable le digo ¿Me abre la puerta por favor? -

- Si, querida. Nos vemos el lunes. No te olvides de la boletita.

- Si...el lunes...

Un viernes que parece domingo: me anticipo a la amargura

Vos,

que estás harto de tu trabajo.

¿Cuántas veces por día te lo recordás?. Seguro que ninguna. Para no amargarte la vida. Y claro, está bien: yo haría lo mismo. Apenas una vez al año se te viene a la cabeza la palabra exacta para rotularte en tu vida laboral: no sos más que un esclavo.

¿Y entonces porqué trabajás?.

Para tener plata. Para comprarle el Corsita gris a tu vecino. Para ir al Carrefour y volver a tu casa con un MP4 de diezmil Gb y una cámara digital Sony de dos millones por diez a la veinte megapixels. Para ser feliz.

No sos más que un idiota. Igual que yo. Que te olvidás de las cosas importantes que son menos cómodas que ir al paseo de las Pulgas todos los domingos a envidiar a los artesanos "que hacen lo que realmente les gusta". Carteritas, zapatitos, aritos, macetitas de barro y hasta un bonsai con un palo borracho.

Y los domingos a la noche es el infierno.

"Mañana es lunes, mañana hay que ir a trabajar". Es lo único que se escucha adentro de tu cabeza.

Si tenés la suerte de padecerlo con alguna otra persona que también trabaja el lunes, te sentís más parte del sistema, menos solo, vamos. Rezongan al unísono. Se quejan a coro.

Trabajar un lunes y ser feliz un domingo a la noche, son variables mutuamente excluyentes: o una cosa o la otra. Nunca las dos al mismo tiempo.

Yo acabo de amargarme tratando de calcular a ojo cuántos lunes hábiles me quedan en la vida. Y si: son muchos. Lo suficiente como empezar a amargarme desde hoy, algún viernes perdido de abril del 2007. Me quedan también la misma cantidad de domingos. Por lo que mi valor estimado se multiplica por dos.

Mi
entusiasmo
se
cae
a
un
abismo.

Y sin embargo...¿qué hago?. Nada.

Evidentemente algo funciona mal en la sociedad para que ir a trabajar signifique tamaña tortura.

Y lo peor de todo es que nos creemos, tan, pero tan profesionalmente inteligentes...

Qué bonita vecindad

Me siento ante la obligación de confesar, que no hace mucho tiempo que empecé a ver a los personajes del Chavo como a gente adulta disfrazada de niños. Para mí siempre fueron pendejos en cuerpos de grandes y nada más.

La mirada de los mil metros

Hay una canción que cuando termina, se escuchan las voces y las risotadas de las hojas de los árboles, de los postes de madera y de las rejas de las casas.

Y también de un gato.
Drogarme.

Abrir una ventana.

Y hacer algo muy mogólico.

Mis verdades

Aveces es como si "el resto de las personas" no estuviera compuesto por muchas personas,
sino por una gran unidad maciza formada por manojos de seres humanos atados con cinta scotch.

jueves, abril 26, 2007

Maiadas

Siempre me repite la misma boludéz. Lo malo no es que sea una boludéz, sino que sea tan irritantemente repetitiva. Yo pienso en una cabeza de pescado. Una trucha.

Hacer,

una y otra vez,

el papel de boluda.

(¡Esa soy yo!).

Gracias Roberto, gracias. Ahora te crucifico. Movete mal pero movete. "Pisa el acelerador...". Con las manos heladas espero. Sin té. Sin música. Sin cachibaches, ni imaginación, ni ósculos, ni espéculos, ni....bueno...ni nada.

Crónicas de una: la calle está llena de gente mala y yo soy una estúpida

Camino hasta la parada del colectivo. ¿El destino?: la concha de la lora.

Cruzo a comprar cospeles. Veo venir el colectivo desde el quiosco. Frena en el semáforo. Cruzo otra vez corriendo. Le golpeo la puerta y le pregunto: ¿este es el X1?. "Si", me responde el muy puto.

Me pongo mis auriculares y espero que algún maldito se pare y me deje sentar. Me gusta mirar a las personas en el colectivo y tratar de adivinar en qué barrio se van a bajar. Miro a un viejo que está cansado y me planteo la hipótesis. "Este seguro que se baja en...". Pero ¡MALDICIÓN!. El colectivo dobla inesperadamente. Ninguna calle está cortada. Miro el boleto: X11.

Me bajo donde puedo antes de continuar mi viaje hacia la nada. Escribo un SMS rápido antes de que se me muera la batería que lleva agonizando varias horas: "Me tomé el X11 en lugar del X1. Estoy perdida. No voy a ir". Imagino a mi amiga V riéndose burlona. Busco un Telecentro en una avenida angosta, oscura y potencialmente peligrosa. Me atiende la madre de V.

- Hola. ¿Está V?.

- Se está bañanando. ¿Querés que le diga algo?.

- Si, que estoy perdida y que no voy a poder ir.

- ¿Que qué? ¿Que estás qué?.

- Perdida. Me tomé otro colectivo y no sé dónde cornos estoy. Pero no se preocupe señora, me voy a tomar un taxi hasta mi casa y listo.

Mentira. Apenas si tengo plata para el cospel. Estoy seca, pobre. Nunca aprendí a llegar a fin de mes, diría Joaquín.

Después de mucho preguntar, un santo me indica que podría llegar a mi casa si me meto en una calle oscura, de casas humildes y espero paciente a que pase un colectivo.

En la parada hay una señora enana y un chico que devora un pebete.

Le pregunto a la señora si "acá para el que va para el centro" y me responde con un seco "si".

Viene el colectivo. La señora ni se inmuta y yo subo.

- ¿Vas para el centro? - me pregunta el chofer.

- Si.

- Este no va para el centro. Bueno, no sé. Si querés podés esperar a que de la vuelta.

¿What? ¿Esperar a que de la vuelta a media ciudad para llegar a mi casa?. Ni en pedo.

- No, gracias.

Otra vez en la vereda, la señora enana se da vuelta y me dice:

- El que va para el centro viene del otro lado.

Vieja conchuda. ¿Qué le molestaba decirme antes?. Si el chofer no me preguntaba todavía estoy dando vueltas por alguna calle angosta y potencialmente peligrosa de la ciudad de Córdoba.

Finalmente llegué a mi casa sana y marta. Comí un plato de fideos. Esperé a que FD se conecte. Y como no hay novedades ni buenas noticias, me voy a dormir.

Good night. Good show.

Solo nadie

Mi único deseo para lo que queda del día,

es que nadie me rompa las pelotas.

Mirada café

Sobre todo me gustaba como me miraba. Sobretodo.

Y al final me dijo: "hasta pronto". Y me miró como me gustaba que me mire.

miércoles, abril 25, 2007

Ultimamente...

...he vuelto a adquirir el vicio,
de soñar cosas imposibles...

Noticias del frente

Estoy tremendamente alucinada con ésta canción. Sobre todo con la música, la voz y la interpretación. Si a la misma canción la cantara otro tipo no sería tan fabulosa.

¿Cuántas? Repito, ¿Cuántas veces hablas de lo mismo? Carne de cañón, eres carne de cañón. Gírate que así es la guerra. Drogas duras, blandas, blancas. Hablas mucho en un retrete, y no hay nada más... Con tu nuevo gran amigo no hay nada más. ¿Cuántas? Repito, ¿Cuántas veces sientes el abismo? No hay nada más. Bebes más, tienes más sed. Cierras más los ojos al beber. Luces giran, miran caras... Vámonos los dos de aquí con humo. No hay nada más. Bebes más, tienes más sed. Miras más, tu cara no es de placer. El tiempo avanza a golpes en la pared, sale el sol tras esa misma pared. No hay nada más.
.
.
.
Quiero
ser feliz
. . . cuando . . .
empiece
junio
.
.
.
Querido diario:

Hoy tuve la extraña sensación de que estaba triste porque tenía ganas.

Espejito espejito

Me molesta infinitamente que en la vista previa las cosas se vean de una forma y cuando las publico se vean de otra.

Es como cuando frente al espejo de mi casa me veo hermosa y cuando salgo a la calle y me miro en algún vidrio me doy cuenta de que salí hecha un cuco.



NB: creo que es la primera vez en mi vida que escribo la palabra "cuco".





LA MUJER ES EL SEXO DEVIL

No disponible

Entro al msn y veo su nombre por primera después de un mes y medio de semi-agonía. "No disponible". De modo que ni quería hablarte infeliz.

Espero sin esperar. Miro la barra de abajo esperando ver una luz azul titilando que inquiete mis sentidos. Y nada. Me canso de esperar (sin desesperar) y me voy. Ponele que pasaron cinco minutos así.

Sin embargo estoy feliz. ¿Por?. No sé darling, no sé. Sospecho que es porque todo este tiempo supuse que me había puesto en "No admitir" y que si me sacó ese rótulo, fué porque quería hablar conmigo. Vayauno. Vaya uno a saber.

Igualmente no hablamos. No me saludó. No lo saludé. En este momento no me importa. O mejor dicho: no es lo que más me importa.

domingo, abril 22, 2007

Hoy hice algo muy maduro: no me compré ningún libro de Bukowski.
Sin duda, las reflexiones domingueras son las más claras, las más reales, la más reveladoras

y naturalmente,

las más tristes.

La pregunta que nadie puede responder:

¿Porqué los otros sí y yo no?
Creo que uno empieza a "no saber lo que quiere", cuando lo que realmente quiere, no sucede.

"¡¡Esa guitarrita!!"

Nada.
Ni nadie.
Ni siquiera la misma realidad,
logra influenciarme tanto como lo hace la música.

...

Ayer: día irónico. Noche incluída.

Hoy: ganas de llorar reprimidas.



Y de acallar a esa vocecita que me dice manipuladora: "mataaaaaalos...mataaaaaalos".

¿Y si le digo que...?

Si el amor entre nosotros no existe...

¡¡ENTONCES LO HAGAMOS!!

viernes, abril 20, 2007

Mirá! hoy es viernes.

Hoy es viernes.

Dentro de algunas horas se hace de noche.

Los amigos empiezan a organizar salidas.

Los novios llaman a las novias.

Las novias llaman a los novios.

Los amantes llaman a las amantas.

Las amantas llaman al pata de lana.

Los gays ya se están depilando las cejas.

Las lesbianas se están probando la ropa de vinilo.

Esta noche algún pendejo sale por primera vez.

Esta noche alguna pendeja prueba porro.

Hoy algún cana trabaja por primera vez de noche.

En este momento un taxista le está poniendo gas al auto.

Y yo ya me estoy desilucionando porque FD no me hace sonar el teléfono.
No. No es una buena poronga lo que me hace falta. Es otra cosa. Pero no sé qué.

Maia tu sexóloga

A la gente que conozco le gusta hablar de sexo conmigo.

Delta tº

El agua caliente me duele.

Soy una cagona de poca monta

Lo que me pasó hoy es digno de ser contado. Y no solamente eso: sino que también podría ser el argumento de un chiste del Negro A l v a r e z. Me da vergüenza, mucha vergüenza contarlo. Pero es algo que tarde o temprano me tenía que pasar.

Hoy se cortó la luz en el trabajo unas cinco veces. Eso significa que nos quedamos sin computadoras. Eso significa que no puedo hacer nada. Eso significa por ende, que cuando se corta la luz yo deambulo de oficina en oficina hasta que a la maldita luz se le ocurre volver. Esta vez no fué distinto. Pero ya aburrida de girar de box en box, me fuí al baño a cagar.

Debí haber sospechado por el ruidito de agua del hinodoro que ya alguien había entrado hacía poco y había consumido el agua disponible. Pero claro cuando aterricé encima de esa conclusión yo ya me había cagado la vida (generalmente me cago "en la vida").

"No vaya a ser que me pase lo que siempre temí", me dije mientras me limpiaba.

Y si. Porque cuando apreté el botón, el hinodoro ni se enteró: todo seguía ahí, en el mismo estado en el que había salido de mi vientre.

Me dió calor. Mucho calor. Me puse nerviosa y me reía al mismo tiempo.

¿Qué hago?

¿Qué hago?

¿Qué hago?

Y entonces la ví ahí. Pobrecita. Tan inocente esa tacita de vidrio esmerilado. Tomé coraje, agarré un manojo de papel en la mano y empecé.

Primero uno. Lo recogí con la tacita, dejé caer el agua que sobraba, lo deposité cuidadosamente en la palma de mi mano cubierta por el papel para después tirar el paquete al tacho de basura.

"Tengo que pensar en los bioquímicos. Tengo que pensar en los bioquímicos".

Y entonces me ví ahí. Media agachada, con un sorete en la mano y diciendo: "tengo que pensar en los bioquímicos". Y me empecé a cagar de risa. La escena era de lo más subrrealista.

Y seguí: ahora el segundo. Ya tenía ganas de vomitar. Volví a envolverme la palma de la mano con papel. Volví a tomar coraje y salí a cazar cacas con la tímida tacita de vidrio esmerilado. Menos mal que nadie entró en ese momento. Menos mal que ningún sorete se me cayó al piso.

Terminé el procedimiento y pensé: "hubiera sido más fácil cagar en el tacho de basura".

Pero la cosa no se termina ahí.

Cuando salí haciendome la estúpida, la chica que limpia estaba esperando en la puerta para entrar.

"Yo te recomendaría que esperes un ratito antes de entrar", le digo riéndome timidamente.

Gladis abrió la puerta del baño de par en par y se fué.

Yo me puse a trabajar como si nada extraño hubiera pasado cuando recordé la tacita: la había dejado en otro lugar y no me acordaba si la había lavado: de los nervios me había olvidado en qué condiciones había dejado la escena del crímen.

Ahí sentí el infierno dentro mío. Mucho calor. Impaciencia. Me fuí corriendo al baño. La puerta estaba cerrada: adios a mi tan preciada reputación. Gladis se estaría vistiendo para irse y ya habría visto la tacita en otro lugar y vaya uno a saber con qué tipo de contendo orgánico adentro.

Esos minutos se me hicieron eternos. "Nunca más me chupo un dedo", pensaba. No sé si fué media hora, quince minutos o un día. La cosa es que Gladis no salía más del baño y amí me estaba morfando los sesos la desesperación.

Finalmente la tacita estaba donde yo no la había dejado. De eso estoy segura. Pero lo que me preocupa ahora no es eso, sino lo que pasará con el contenido de ese tacho de basura hasta el lunes...

jueves, abril 19, 2007

Es extraño. Pero extraño extrañarte tanto. Jua. Es mentira. Mentira. Muy mentira. Muy mía. Muy mía y poco de nadie. Convidame chucrut. Preparame un Fernet. Abrite de piernas y dejame ver que hay. Un calzón sucio. Un ventilador cutre. Una cuchara de la abuela. Dejame ver ese cuchillo de acero inoxidable. Dejame verlo y después matarte con él. Vamos a tirarnos de un décimo piso mientras yo grito desaforada: "soy inmortal, soy inmortal". ¿Qué te parece?.

Putita. Estereotipo de la intelectual, de la liberada sexual, con más complejos que yo un sábado por la noche. Vos seguí hablando con términos técnicos. Tarada.

Abrí un prontuario. Un legajo con cada una de mis estupideces y guardalo bien guardado en una carpeta colgante, en un fichero subterráneo, en una oficina en Kuala Lumpur, en la decáda del 50. Llevate mis vergüenzas a otro tiempo. A otra dimensión. Quemalas. Hacé un asado para 77 hinchas de un club de futbol de San Carlos Minas. No sé. El 77 no es casual.

Hay fantasmas.

"Veo gente viva"

El decía siempre que no teníamos que "elucubrar" sin argumentos. Pero yo elucubraba lo mismo. Siempre nos juntábamos a elucubrar los sábados o los domingos en la plaza. Un día como hoy nos hubieran morfado los mosquitos pero nosotras, hubieramos seguido elucubrando y elucubrando hasta la noche.




"Siempre vuelven", decía yo inflando el pecho.

Pero no.

No siempre vuelven.
Yo no me siento culpable por masturbarme TODOS los días.

Lo que siento es que eso evidencia que hay muchas cosas que no andan bien.

miércoles, abril 18, 2007

mosquitos

Que alguien haga algo.

;-)

Todo, absolutamente todo,

tiene su excepción.
Cuánto pelotudo hay a bordo de internet.
Adentro de mi cabeza hay una sucursal de Blockbuster. Pero solamente con estanterías repletas de películas XXX. Las del género incestuoso, trato de no verlas nunca.

Ultimamente veo una en la que estoy con un negro, gordo con el que practico sexo oral en el techo de mi casa.

Asfixia

Chiringuito. Sapucay. Me habla y me habla y me repite cosas como: "cheque rechazado" "nota de debíto". ¿De qué mierda me habla este pelotudo?. Yo lo escucho y asiento con la cabeza estúpidamente. "Administración" "Procedimiento" "Caja fuerte". Imbécil. Quiero irme a mi casa. Tengo hambre. Quiero ver los Simpsons y rascarme un rato la concha mientras miro el techo. Bla bla bla. No se calla nunca. Tiene mirada de loco. Se ríe y me muestra los dientes blancos. En su aura veo signos $$$. "Hay que fusilar a los que se equivocan". Yo lo miro. El se da cuenta de que dijo una boludéz. Yo no digo nada. No tengo ganas de abogar por el bienestar de nadie. Solamente quiero irme a mi casa a ver los Simpsons y a rascarme un rato la concha mientras miro el techo.

Puntos insuspensivos: lo que hay adentro del círculo

Los puntos de adentro son personas con vidas ordinarias. Tienen vidas comunes: con sólo saber un par de datos es posible extrapolar sus vidas como una función matemática, como una estadística.

Cada cual se mira a sí mismo desde una perspectiva distinta. No te digo nada que vos no sepas. Quizá yo a vos te veo del lado de adentro, pero vos te mirás a vos mism@ desde afuera de la línea que te separa de esas personas que no querés ser. ¿O si?.

Yo, honestamente, quisiera ser del tipo de personas que yo veo adentro del círculo. Es más fácil, más cómodo.

Pero estoy afuera. Y lejos del eje desplazado de esa circunferencia maldita.

De ese club social de pelotudos.

Y como soy una resentida me autodeclaro "persona non grata". De envidiosa nomás. Por no estar satisfecha ni con mi vida ni con mi forma de ser.

Puntos insuspensivos

Es como un círculo negro en un papel blanco. Dentro de ese círculo hay miles y miles de puntitos que se unen entre sí como partículas con signos distintos. Afuera del círculo también hay puntitos pero en mucha menor densidad y por el comportamiento, parecería ser que tienen todos la misma polaridad: se rechazan. Yo soy un puntito de afuera. Y compartía el sentimiento de individualidad con los otros puntitos de afuera. Pero la densidad afuera del círculo es cada vez menor. Y yo me siento cada vez,

más individual,
más sola.

martes, abril 17, 2007

Os odio

Todos,

y en filita india,

se pueden ir bien a la mierda.
¡VIVE!

Te amo Whitfield


El problema es que...

...no está lo suficientemente desquiciado como para enamorarse de mí.

lunes, abril 16, 2007

¿Es idea mía?

¿O tener tránsito lento está re "in"?
Lo malo de encontrarle SIEMPRE los puntos buenos a las situaciones malas, es que uno termina aferrándose a esas situaciones malas y deja, un poco por comodidad, de buscar las que son realmente buenas.

Digamos que es más o menos como si uno se encariñara con su propia miseria...

Menú 5,50

Entré a unos de esos bares a los que nunca iría, exceptuando dos motivos:

1- la necesidad imperiosa de un baño.
2- la necesidad imperiosa de comer.

En este caso fué la segunda razón la que me hizo entrar a ese tugurio de mala muerte. Todos hombres. Unos diez, mirando un programa de autos y minas en bolas. Re cómoda estaba yo ahí esperando que la moza (cuyas chichas brotaban de sus calzas azules como dos pliegues de pura humanidad obesa) se decidiera a atenderme.

- Hola. ¿Qué tenés de menú?.

- Hoy no hay menú.

- ¿Y qué hay para comer?.

- Milanesas, supremas...

- Bueno, traeme una milanesa con papas.

- No hay papas.

- Bueno, con puré.

- No, tampoco hay puré. Solamente ensalada.

- Y bueno...traeme una milanesa con ensalada.

- Bueno. ¿Y qué vas a tomar?.

- Una Coca.

- No tengo Coca. Pepsi.

- Bueno, traeme una Pepsi.

- ¿Común o Light?.

- Común.

- No tengo. Te traigo Light.

La ensalada tenía una baba y la milanesa era del tamaño de la palma de mi mano. Así que me cagué de hambre.

Crucé la calle. Entré a una heladería. Me compré un heladote y crucé la calle para tomarme el cole. El viento maldito hizo que el helado se me deshiciera en las manos y actuara como un rifle dispárandome fascineroso, balas de helado de mantecol en la ropa. Enchastré la campera. Me enchastré el pantalón, el paragüas que nunca debí haber sacado del placard y mis manitas de vainilla quedaron bañadas de chocolate bariloche.

Un asco.

Nunca más un menú de 5,50.

Una noche de sexo sin FD

Las sábanas me hacen picar. Me retuerso, me doblo, le pongo el culo a la altura de su pija que parece un mástil patagónico doblado por el viento. El telo es de cuarta. Tampoco se puede esperar mucho de uno de dos horas por veinte pesos. Pero si no fuera por las sábanas picosas, o la orquesta acuática del hinodoro perdiendo, la cosa no sería tan grave.

No me gusta como me besa. Sus besos me hacen sentir que estoy chupando un hielo derretido (demasiado líquidos para mi gusto). Se pone el forro al revés. Se lo saca. Lo da vuelta. Me da asco. La vaselina me da asco. La realidad es muy distinta a mis fantasías. No sé porqué, pero ultimamente disfruto más autogestionándome los orgasmos que dejándolos a merced de otra persona. Trato de no pensar en nada. De dejar que mi cuerpo tiemble, agarre, muerda, todo instintivamente. Pero inevitablemente me acuerdo de mi época. "Mi época". Esa en la que abría las piernas y se me caían los orgasmos.

Me la pone y me duele. Es la forma de su miembro. Es el latex. Es que estoy pensando en las lámparas de colores, en el espejo redondo, en llamar a FD, en que mañana tengo que trabajar y muchos etcéteras. Me pregunta susurrando si llegué. Sé que hizo todo el esfuerzo del mundo por hacerme "correr". Pero no. Tardaría más en llegar a un orgasmo que en hacerme millonaria. Pienso qué decirle y finalmente decido que es mejor mentirle. "Si, ya llegué", le digo dudando de mí.

Las sábanas me pican. Pienso que FD me cagó la vida. Que retrocedí siete años en el tiempo. Que tengo la sensación, el presentimiento de que no voy a volver a disfrutar de coger con nadie más. Pienso que soy una estúpida. Que soy mis amigas cuando tenían estos problemas. Que soy yo en el 2001. En el 2002. En el 2004.

Y en que todavía falta una hora para que se termine el maldito turno.

domingo, abril 15, 2007

Anoche le decía: "te quiero, te quiero". Y le daba besos. Muchos besos en la mejilla.

Y...

lo

mejor

de

todo

es

que

recién

lo

conocía.

Situación naranja

- ¿Y cómo andás de amores?

- Y...mal. Sino no estaría acá con vos..jajajaja

- Qué cruel que sos

- Si, puede que sea cruel pero es cierto. Yo sé que vos también andás mal de amores porque sino no estarías acá conmigo. ¿O no?.

- ....



Levanta una ceja y piensa.

Después me pide una moneda de un peso para el que cuida los autos y nos vamos en silencio a estar juntos por separado.

sábado, abril 14, 2007

Será lo que deba ser,

o será una película doblada al español.

Algo así...

...es como la sensación que sentís cuando vas distraído por la Martín García mirando el paisaje y de repente mirás para abajo y no hay nada, para después bajar como en una montaña rusa y sentir el estómago a la altura de los ojos...
- Me gusta mucho cuando el aire está así...me produce una sensación hermosa en la piel.

- ¿Me describís esa sensación?

- Siento como si el aire me abrazara...Pero no amí solamente, sino a todo con lo que tiene contacto.

- No me esperaba esa respuesta.

- Y yo no me esperaba esa pregunta.

Un sueño que tuve anoche

Camino junto a un hombre por una ciudad de calles estrechas y casas altas. El camino es de piedras y en subida. Veo pasar a un hombre en una bicicleta y lo reconozco. "Es Alberto", pienso. Le grito: "Alberto, Alberto". "Alberto" se da vuelta pero no es Alberto. Tiene la cara demasiado colorada, del color de la naríz de los borrachos y la mirada no es la mirada de Alberto. Pero se le parece. Este hombre nos dice algo.

Sigo acompañada de alguien. Es el mismo muchaho que caminaba conmigo, solo que ahora estamos en una casa antigüa de esa ciudad buscando algo que no sé que es. La casa es un laberinto. Tiene muchas habitaciones sin salidas, con muchos recovecos y espacios vacíos. Lo que más me acuerdo es una sección de la casa que es un jardín de infantes. Ahí hay chicos chiquitos y maestras que nos miran con miedo, pero siguen en lo suyo, intentando no alterar la calma. Las paredes están pintandas de verde manzana. En una hay un payaso pintado. Un payaso, o un bufón, no sé. Mi compañero tiene rulos, es morocho y es más petiso que yo. Tiene cara de bueno. Y es bueno. Al salir de la sección de la casa que es jardín de infantes, besa el marco de una foto donde salen nenitos en guardapolvo a cuadritos. Yo pienso que es una actitud rara y nos vamos.

Salimos a un patio. El chico de rulos desapareció de mi sueño y estoy con una amiga de la infancia. Tengo una cartera color ocre tipo hindú donde llevo algo muy importante. Tenemos que escalar una especie de muro pero yo tengo unos zapatos que me quedan grandes y no puedo. Ella no puede por otro motivo que no sé cuál es. Aparece el hombre colorado, desde lejos. Lo esperamos y le pedimos que nos sostenga la cartera mientras subimos. Mientras nosotras tratamos de encajar los pies en los insterticios del muro el hombre se va. Con la cartera en la mano. Empieza a jugar con unos chicos a pasárselas de mano en mano, como si fuera una pelota. A mi amiga y a mí nos invade la desesperación, pero no podemos hacer nada.

Estamos en ese patio. Hay una especie de campamento y junto con un grupo de dsconocidos, somos prisioneros del hombre de la cara colorada. Mi amiga Consuelo duerme sobre un colchón muy finito y tapada con una sábana. Tiene frío. Al otro día ella se va a ir a otra parte y yo estoy triste. Le doy un beso y me acuesto a su lado.

Un blog. Estoy leyendo un blog de una compañera de trabajo. "Escribe bien la turra", pienso. En el diseño resalta el color bordó, tipo vino tinto. Y las letras son blancas y finitas y aveces cuesta leer. Sigo bajando. Hay fotos. Una especie de foto, formada por fotos chiquitas de las caras de soldados muertos. Lo curioso, es que la foto de los soldados no había sido tomada mientras ellos estaban con vida, sino, que era la foto de sus cadáveres. Otra curiosidad es que tenían una especie de casco con forma de frasco de vidrio. Como esos en los que venden las aceitunas en los almacenes. "Por las radiaciones debe ser", pienso. Sigo mirando las fotos de los soldados. Hago una relación con la segunda guerra mundial, pero no me acuerdo cuál es. Me da mucha impresión y así y todo sigo mirando. Algunos esqueletos todavía tienen pelos, dientes. Algunas incluso ojos. "Esta noche voy a soñar con esas caras", pienso. Creo que ni siquiera me pregunto porqué les tomaron las fotos muertos. Lo que más me inquieta es imaginarme a un tipo con una cámara de fotos profanando tumbas de ex combatientes de guerra. Vuelvo a pensar en el hombre de la cara colorada y en su implicancia en todo esto.

Mambrú. Eran cinco y ahora son cuatro (no sé cuál es el que falta). Van a tocar en un instituo de educación a distancia en la calle Colón. Están nerviosos. Se mueven de un lado para el otro. Como hormigas. Yo los miro desde lejos y me voy.

viernes, abril 13, 2007

Bueno. Creo que esta noche me voy de paseo por la city.


Lo que más me gusta de tener un blog es que no tengo que darle explicaciones a nadie

El asunto es más o menos así: cuando estoy mal (osea, triste) estoy mal porque estoy mal. Y cuando estoy bien (osea, no estoy triste) y empiezo a ser conciente de ello, me pongo a pensar en mi miserable vida y me angustio otra vez.





TIC TAC






¿Qué hora es?






¡ES LA HORA DE CONSULTAR A UN PROFESIONAL!






Posibles causas del mal que me aqueja:

1- En realidad cuando estoy bien, sigo estando mal. Es decir, es un bienestar inestable. Como cuando te reís de la desgracia ajena: te divierte pero con un "touch" de cargo de conciencia.

2- Me siento culpable de algo que no sé, y por eso no me dejo ser feliz. Nota mental: hablar con Corín apenas me desocupe.

3- Necesito un cigarrillo para poder seguir pensando las causas de mi malvivir.

Vamos a una pausa y enseguida volvemos.
















NB: no estoy drogada.

Hay gente que habla conmigo

- ¿Sabés lo que pasa?. Que me siento como el orto, eso pasa. Me conecto al msn y los contactos que están siempre conectados me dan náuseas...

- Pe...

- ...lo que yo no sé es que si realmente me dan náuseas o el único contacto que no me daría náuseas nunca se conecta y eso genera que los otros me den náuseas.

- Yo creo que lo segundo.

- Si, honestamente yo también. Encima también...eso...

-¿"Eso" qué?

- Nada, boludeces mías.

- ¿Pero de qué boludeces me hablás?

- Nada...otro día te cuento.
Cuando me muera,

quiero que me entierren con mi buzo de polar rojo.

Que lo sepa el mundo entero

Este blog se solidariza con la causa de Albertito,

el pagafantas.

jueves, abril 12, 2007


El que dice que:

"no por mucho madrugar, se ven vacas en camisón",

es porque evidentemente, nunca durmió en mi casa.

Dos años te hicieron falta para darte cuenta de que tu novia es una infradotada

JODETE.

Por buscarte una novia que lloró cuando vió a Luis Miguel en el Chateau.

(No culpes a la noche, no culpes a la playa, no culpes a la lluvia, culpate a vos por pelotudo).

E' lo quiay

"...entonces la semana que viene nos juntamos a intercambiar fluídos..."
SOY UNA CHICA "RARA"
Dear blog:

cada día que pasa estoy un poco menos triste y más intrigada.

Bic

Aveces siento que lo mejor que me puede pasar es tener un encendedor en el momento oportuno.

Por que yo lo digo:

HOY SOY LA MUJER MÁS INDISPUESTA DEL MUNDO.
La secretaria de RRHH liquida mi sueldo a fin de mes, osea que de alguna manera, ella lo genera.

Cuando a mí me pagan, me liquido el sueldo a principio del otro mes, osea que de alguna manera, lo degenero.

martes, abril 10, 2007

¿O qué?

Para mí que se murió. O no me quiere ver nunca más. O está postrado en una silla de ruedas. O perdió el celular. O mi mail. O la memoria. Para mí que se convirtió en picaflor y emigró a Japón. O está con otra. O le dí asco. O un jarjacha le arrancó los ojos. O se cayó a un pozo ciego. O lo secuestró una pandilla de yakuzas en kimono. Para mí que se quemó los dedos haciendo arroz. O fideos. O una costeleta. O le contagié ladillas. O lo pisó un tren. O un colectivo. O Pedro Canoero en su canoa. Para mí que se durmió hace un mes mirando tele y no se volvió a despertar. O se despertó siendo otra persona. O se ahogó en el río Suquía. O en un vaso de agua. O en uno de cerveza (o de Fernet).

O todo fué producto de mi imaginación,

de mi esquizofrenia sentimental digamos...

domingo, abril 08, 2007

Felices Pascuas

Deambulo por la casa cuando escucho desde la otra punta que me llegó un mensajito de texto.

Corro apurada, entusiasmada, pensando que "puede que quiera que vayamos a tomar mate a la concha de la lora aprovechando esta hermosa tarde otoñal".

Agarro el maldito aparato, el mensaje es de otra persona.

"Un mensaje de paz para vos y todos los tuyos. Felices pascuas".

VOS Y TODOS LOS TUYOS SE PUEDEN IR A LA PUTA MADRE QUE LOS PARIÓ,
pensé.

Esperando una fatalidad, un llamado del cielo

A menudo confundo la fiaca con la desesperación.

Estiro las piernas, los brazos. Y no sé si lo que tengo son ganas de llorar o de bostezar (o las dos cosas). Es raro, sí.

Agarro un libro con desconfianza. Tapas negras. Títulos anaranjados. Un círculo en la portada indica que es, efectivamente, el tomo I. Leo. Engullo un poema detrás del otro. Fantástico. Cuánto consuelo encuentro en esas palabras traducidas. No sé si es consuelo. Pero funciona, entre muchas otras cosas, como un libro de autoayuda.

Me siento en la cornisa. A mitad entre una puerta y otra. La única salvación, lo único que me hace sentir bien: la música y los libros.

La compañía de las personas pasó a segundo plano. ¿A segundo?. No, a tercero, a cuarto, a quinto. ¿La verdad?. Nunca estuvo en primer lugar (salvo en contadas excepciones). Siempre fuí igual. Y no, no me estoy dando cuenta de eso ahora.

Mal en todas partes. Con todas las personas. Mal conmigo principalmente. Mal en la facultad. Mal en el trabajo. Mal financieramente. Mal del corazón. De los pulmones. Mal de la cabeza.

Y me cansé.

Me doy por vencida.
Ellas,
asesinaban las baldosas,
con sus tacos aguja.

Una vida dirigida por Cris Morena

Los días de su vida son como los sucesivos capítulos de una novela de las tres de la tarde...

...

...No. Como una de las seis de la tarde.

Novios celosos. Novios desequilibrados. Novios que amenazan con tirarse de un sexto piso. Novios con madres insoportables. Novios "que la aman infinitamente" y que "darían su vida por ella". Novios que alguna vez le pegaron. Novios compulsivos. Obsesivos. Novios que pierden la cabeza por su amor. Novios pisando el umbral de la locura. Novios. Novios. Muchos novios. Aparecen como por debajo de los zócalos. Como cucarachas hambrientas: "necesito que me pisotées un poco, mi amor". Novios con el ego reducido a su mínima expresión. Novios tachados, apesadumbrados. Novios carismáticos. Tímidos. Inteligentes. Bobos. Hijos de puta. Buenas personas. Padres de otros hijos con otras novias igual de bobas, igual de hijas de puta, igual de buenas personas, igual de desequilibradas que ellos. Novios sin pasado.












Seres que pertenecen a una especie que no termino de entender.

sábado, abril 07, 2007

Sí.

Siento admiración por aquellos hombres capaces de escuchar un partido de futbol por la radio y entenderlos.

Amistades...

Yo hablo y hablo y hablo de lo mismo. Una y otra vez. Estoy pesada como collar de sandía. Monotemática. Yo hablo y hablo y hablo. Y pregunto "¿qué pensás?". "Ponete en su lugar, ¿vos hubieras hecho lo mismo?". "¿Acaso no es re cruel?". Sí, sí, sí. A todo "que sí". Mi amiga me da la razón como a los locos. Yo hablo y ella bosteza. Yo la miro y ella mira al suelo.

Pero pará un poco.

A mí también se me derritieron los oídos escuchando sus historias pedantes. Y no me dormía: escuchaba atenta. Pero no me importa. Inmune a la indiferencia de las personas. Ayer mis amigas con sus novios y yo. Del otro lado. Hoy: "te extraño Maia, tengo muchas ganas de verte". Hoy todas tienen ganas de verme. Que se vayan a la mierda. ¿Lo peor?. Es que yo las mando a la mierda, pero si me piden que las acompañe me voy con ellas.
Hojas de lechuga. Whisky con licor de dulce de leche. Jua jua jua. Metete el oporto en el or...¡Ay me duele la panza!. ¡Ay los huevos de Pascua!. Esquina con sol. Manos arrugadas. Una idea por la mitad. Dos viejas que se deslizan por un piso de baldozas blancas y negras. Dos viejas en camisón como piezas fantasmagóricas en un tablero de ajedréz. Una familia japonesa insestuosa.

Frío.

Estoy cansada.

viernes, abril 06, 2007

Todo lo que necesito para ser feliz hoy




Y Yann Tiersen


NB: siempre desconfié de la gente a la que no le gusta el chocolate.
- ¿Qué hiciste el fin de semana pasado? - me pregunta una amiga estrenando soltería

- Nada... bueno, nada interesante: intenté estudiar...y también me dediqué a desarrollar hipótesis de causa.

- ¿De causa de qué?.

- De porque no me llamó más.

:-(
Anoche soñé que FD me rechazaba sistemáticamente. Como mi sueño había sido una puta mierda, en un minúsculo flash de lucidéz a la mañana, decidí ganarme 10000 euros e irme a Europa. Por supuesto que mi viaje duró no más de dos minutos, porque hay días en los que ni siquiera me permito soñar cosas que no tienen sentido.
Hace mucho que a las 12:06 no pasa nada.

miércoles, abril 04, 2007

Y que cuando fumo y hay viento, me quemo los pelos del flequillo

Señas particulares: todas.

Inclasificados

Joven dama de 25 años, busca desesperadamente sexo fácil con hombre de entre 18 y 45 años que no hable durante el coito y que la deje en su casa al final de la velada a-romántica.

Ando jodida, che...

Ando mal de los hígados. Pero mal mal. Todo el tiempo tengo sueño. Me duermo en cualquier parte. Cuando estornudo, instantaneamente empieza a dolerme la cabeza como si un rayo eléctrico me estuviera atravezando la cien. No cago desde hace días. Si respiro profundo, me duele la boca del estómago.

"Me siento pesada, hinchada".
Yo,

que me muero de ansiedad por responderte las preguntas que nunca me vas a hacer.
Hoy todos los camioneros eran "Okabe".

lunes, abril 02, 2007

...y aquello que hizo caducar la idea de la muerte como una forma de salvarse del olvido...

Frío

"Empecé a barajar la hipótesis de que estés muerto"
Yo edifico mi mentira de patas cortas.
Sos cadáver exquisito. Sos humano con líneas de sangre bordeándole la cara. Sos hombre que va en camilla. Sos persona con los ojos cerrados.
Fuiste alguien que ahora está muerto.
Fuiste dueño del alma que yo más quise.
Ni media palabra, ni un monosílabo, que me haga sentir bien. Nada. Un silencio de domingo muerto. Y una casa tomada. La percepción como un vidrio. ¿Y amí que carajo me importa la verdad?. Yo manejo hipótesis absurdas. Y nunca pasa nada. Y entonces me doy cuenta, de que es por mi salud mental, que prefiero saberte vivo, pero creerte muerto.

domingo, abril 01, 2007

Una sentencia asíatica

No todo lo que pasa a tu alrededor,

pasa alrededor tuyo.