viernes, abril 27, 2007

Brrr

- Entonces busco los zapatos el lunes que viene - le digo queriendo terminar la conversación al zapatero.

- Si, el lunes.

El hombre se queda un rato cavilando a mitad de camino entre el mostrador y la puerta.

- Si, el lunes los busco.

- Si.

- Si.

- Si, el lunes vení a buscarlos.

- Si.

Ya estoy al lado de la puerta y el viejo no se decide a abrirme.

- Bueno, entonces el lunes vengo a buscarlos, así tiene tiempo de limpiarlos también - digo como queriendo ponerle de una puñetera vez punto final a la charla -

- Claro, vení el lunes así te los limpio con ese material que me van a traer de Buenos Aires que es mucho mejor que el que se consigue acá. Porque el que yo tengo no te va a servir de mucho: no es de buena calidad. Yo no quiero arruinarte esos zapatos, son buenos. Mejor esperá hasta el lunes así te los dejo "pipí cucú".

- Está bien. Entonces los vengo a buscar el lunes de la semana que viene - le digo ya un poco irritada.

- Si, el lunes. No te olvides de traer la boletita esa que te dí, porque sino no voy a poder dartelos. Nosotros nos manejamos con esas boletitas porque ultimamente hay tanto trabajo ¡y si no fuera por las boletitas, se nos armaría un lío!. Mi mujer maneja todo esa papeleta y si no tengo todo al día después me agarra y me reta. Así son las brujas...hahaha...

- Claro...- me rasco la cabeza y tratando de ser amable le digo ¿Me abre la puerta por favor? -

- Si, querida. Nos vemos el lunes. No te olvides de la boletita.

- Si...el lunes...

2 Delirios ajenos:

Blogger Dr. CroW said...

A veces me encuentro con gente tan sola, que me da miedo.

1:15 a. m.  
Anonymous Anónimo said...

¿Yo por ejemplo?

jaja

12:43 p. m.  

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