viernes, julio 29, 2005

En síntesis

Tomo café y fumo. Me mancho los dientes mientras intento cagar.

Pensaba. Hice una pequeña sintesis (si es sintesis es pequeña..) y mientras la redactaba hermosa y sencillamente en mi cabeza, sentí el ruido de ese motor americano y era el. Pasó de largo, de la misma manera por la que pasó por mi vida. Me temblaron las piernas y eso evidentemente indica que produjo algo extraordinario en mi.
Y pensaba: que la historia se repite siempre de la misma manera.
Intento por todos los medios olvidarlo. Pero casi como un tropiezo del destino aparece en mi vida una vez mas. Un mensaje que me hace reir y me provoca alucionaciones durante todo el día. Yo respondo. Y así durante algunos minutos. Después la comunicación se esfuma, como el humo de un cigarrillo.
Nuevamente intento poner en marcha mis mecanismos de defenza porque sé y supe desde un principio que hay ciertas cosas que no tienen futuro. Dan resultado. Pero después de un tiempo, las voces de mi cabeza me sugieren llamarlo. En realidad no son voces, son ecos. Y lo llamo. Hablamos, nos reimos, nos confundimos entre nosotros. Cortamos. La comunicación vuelve a esfumarse una vez mas.
Días después, un mensaje de texto, un favor cualquier excusa es valida para no perder el contacto del todo, pero mantenerlo colgando de un hilo sigue siendo la meta. Y así sucesivamente hasta que alguno de los dos decida cortar por completo la estela de recuerdos que vive en nosotros.
Todo indica que los días de verano, de calor agobiante que pasamos sentados en una plaza o en el parque, no fueron en vano.

Sigo con ganas de escribir. No quería verlo. Me hizo mal, me conmovió.
No quiero hablar sobre cosas que no sé. Quiero contar lo que me pasa, pero esa es una de los temas que menos tengo estudiado.
Me llevo a marzo autoreflexión 1.
Estaba bien, CARAJO. Me hizo realmente mal verlo pasar, montado en su putísima indiferencia de resentido autosufiente. Siento que de alguna manera no podemos separarnos. No tengo miedo de no volver a estar con el. Tengo miedo de que nadie mas pueda hacerme sentir feliz.

Estoy buscando en los prfundo de su misterio, la palabra que solucione lo que aún no es problema. Sin persuadir los demonios de la traición, que fueron los primeros en acudir a su llamado de desesperación. A su grito de : no quiero depender de nadie.

jueves, julio 28, 2005

UFA!

UFA, estoy aburrida de mi vida y tengo ganas de hacer otra cosa con ella. Me siento tan irritable. Cualquier cosa me pone furiosa. A mis amigas no las soporto. No tengo ganas de hablar con nadie. Al final, me doy cuenta que bajo esta piel, siempre voy a estar alojada yo. Otra vez me vuelvo a retraer hacia adentro, como una araña asustada.
No quiero saber nada con nadie. Aveces siento que me cuesta mucho involucrarme sentimentalmente con las personas. Y otras, siento todo lo contrario.
No entiendo bien que me está pasando. Es como si necesitara un giro, algo rotundo, un viaje, una migración. Un exodo de mis miedos hacia otro planeta. Un ciclón de respuestas a mis preguntas.
Estos son los momentos en que necesito a alguien que me conosca lo suficiente como para darse cuenta de que necesito tanto su compañía como su silencio.
Mientras los segundos se suceden a si mismos, nadie me conoce.
Y las aguas se dividen paralelas, los mares del pecado anuncian los rituales del deseo. Del mas loco y ardiente deseo.
Si los besos desenfrenados de un amor de juguete, vacían las penas mas atolondradas y tenaces. Si vencieron las fuerzas del miedo y el dolor. Porque hicieron del sueño algo imposible e inalcanzable. Si la vida se vistió de fiesta cuando la noche se volcaba sobre nosotros. A los peligros ingenuos en una estación de servicio. Y al WWW 001. Fueron tan oportunamente sutiles aquellos besos de los que hablo. Si la madrugada padecía la enfermedad del engaño. Si el rocío era una señal de advertencia. Cuando el vino no era tan solo vino y Ser, era mas que una gaseosa. Y ahora volvió todo a normalidad. A la parálisis, al encierro. A la muerte gloriosa de los días que arrastran las hojas de los calendarios. Al cinismo del silencio infraagudo. Al pasivo revuelo de mi pecho. Al latir sin sentido de mi corazón.
Vuelvo a buscarle un sentido a todos estos días que me quedan.
Y a quien le digo todas estas cosas?. A quien le importa?.
Me voy a ver historias de algo que no tengo de personas que no son como yo (Historias de sexo de gente común)

UFA!

UFA, estoy aburrida de mi vida y tengo ganas de hacer otra cosa con ella. Me siento tan irritable. Cualquier cosa me pone furiosa. A mis amigas no las soporto. No tengo ganas de hablar con nadie. Al final, me doy cuenta que bajo esta piel, siempre voy a estar alojada yo. Otra vez me vuelvo a retraer hacia adentro, como una araña asustada.
No quiero saber nada con nadie. Aveces siento que me cuesta mucho involucrarme sentimentalmente con las personas. Y otras, siento todo lo contrario.
No entiendo bien que me está pasando. Es como si necesitara un giro, algo rotundo, un viaje, una migración. Un exodo de mis miedos hacia otro planeta. Un ciclón de respuestas a mis preguntas.
Estos son los momentos en que necesito a alguien que me conosca lo suficiente como para darse cuenta de que necesito tanto su compañía como su silencio.
Mientras los segundos se suceden a si mismos, nadie me conoce.
Y las aguas se dividen paralelas, los mares del pecado anuncian los rituales del deseo. Del mas loco y ardiente deseo.
Si los besos desenfrenados de un amor de juguete, vacían las penas mas atolondradas y tenaces. Si vencieron las fuerzas del miedo y el dolor. Porque hicieron del sueño algo imposible e inalcanzable. Si la vida se vistió de fiesta cuando la noche se volcaba sobre nosotros. A los peligros ingenuos en una estación de servicio. Y al WWW 001. Fueron tan oportunamente sutiles aquellos besos de los que hablo. Si la madrugada padecía la enfermedad del engaño. Si el rocío era una señal de advertencia. Cuando el vino no era tan solo vino y Ser, era mas que una gaseosa. Y ahora volvió todo a normalidad. A la parálisis, al encierro. A la muerte gloriosa de los días que arrastran las hojas de los calendarios. Al cinismo del silencio infraagudo. Al pasivo revuelo de mi pecho. Al latir sin sentido de mi corazón.
Vuelvo a buscarle un sentido a todos estos días que me quedan.
Y a quien le digo todas estas cosas?. A quien le importa?.
Me voy a ver historias de algo que no tengo de personas que no son como yo (Historias de sexo de gente común)

miércoles, julio 27, 2005

MIX

Autodestructiva, Infame, Paulatina, Autoritaria.

Estoy cansada. El sueño me vence una vez mas. No consigo mantenerme en un estado de vitalidad que me permita alcanzar mi máximo nivel de eficiencia (parece una propaganda de yogurth).
Tengo ganas de hacer muchas cosas y a la vez nada.
Hoy desperté a una mujer en el colectivo pensando que se había pasado de su parada, y no. Se tenía que bajar mas adelante.

Cuando creo haber creido lo que alguna vez quise creer, entiendo que no hay mas credibilidad que la me da mi propia creencia.

Detalles. Un detalle, mejor dicho. Un detalle sin importancia, talvez?.

Hoy pensé que iba a encontrar el amor de mi vida a los 96 años.

Hoy me dí cuenta que mi cabeza es una usina de creatividad e imaginación.

Hoy me imaginé una verdulería, llena de cajones de madera con tomates, zapallitos y demás verduras. Y una caja, vacía, con solo media naranja.

Hoy me dolía la cola de tanto viajar en colectivo. Una hora reloj. Con el culo en una butaca dura y sin poder acomodarme.

Hoy me dí cuenta de que necesito urgentemente un transformador de 4,5 Voltios.

A todas aquellas personas que no me quisieron querer. A todas a quellas a las que no quise que me quisieran.
Después de todo, esto es una especie de catapulta universal, manejada por pendejos corruptos y desquiciados. Nada se puede hacer con el destino.
La suerte está hechada. JAJAJA.
Te hecharé de menos.

Chau chau.

sábado, julio 23, 2005

Algo mas

Cuando porfin logré salir del cementerio, ya era un cadaver.
Vacilé un segundo antes de decidir. Tan solo un segundo. Pisé fuerte sobre su hombro y subí un piso mas arriba. Me desperté por fin de ese sueño espantoso. Que no había sido un sueño, sino la interpretación paupérrima del arrebato de mis dedos.
Solía decir en aquel momento cosas como: ¨ami eso no me interesa¨, ¨yo no soy como cualquiera¨, etc..Pero eran oraciones, tiradas al viento. Y se convirtieron en plegarias tristes, dirigidas a un Dios que se fué hace rato de un altar de botellas y cajas de cartón.
Y después de haber pasado repetidas veces por el mismo camino de la incertidumbre, entendí que no hay incertidumbre, porque no hay nada para entender. Solo reconocer y extirpar con pinzas las palabras sueltas de un proxeneta sucio y saparrastroso. Fuera de lo común.
Como un asalto a mano armada de mis principios. Sin valor, y por izquierda, como todo lo que es oscuro y denso. Después volví a pensar que me faltaban cosas por entender. Pagué el peaje con creces. Pero las rutas estaban cortadas. Un gran piquete de recuerdos paralizaba la autopista.
Nunca quise volver ahí.
Casi con presición quirúrgica me sorprendió siendo investigada por un intruso. Alcancé a ver en sus ojos de media hora cada uno, algo turbio.
Cuando quiero pensar no puedo. Cuando quiero escribir me voy como de campamento a otro planeta. Una ficción.
Y tiré de las sogas, y alguien se había robado el contrapeso. Y usé mis brazos pero eran débiles y estaban cansados. Y busqué en alguien una soga y otros brazos, pero eran mas débiles que los mios. Y pemanecimos atascados durante varios meses intentado salir de nuestra miseria. Cada uno por su lado. En el mas rígido de los egoismos.

Llovisnaba, apenas. Eran eso de las 3 de la madrugada. La camioneta estaba estacionada al frente de la embajada del Perú. Ochentoso, se llamaba el bar. Decorado con fotos de cantantes de los 80´. El fué a buscar la llave de un departamente que prometía albergarnos durante lo que quedaba de la noche. Fué en vano. Volvió mojado y lindo. Yo me saqué el corpiño, y se lo di para que le sacara los arcos de alambre que me punzonaban el pecho. La música parecía ambientar cada uno de los momentos. Todos eran distintos, e igualmente hermosos. Y se nos escapó la noche jugando en la camioneta, como si nos quisieramos.

Yo, yo y yo

Yo no me opongo a la tristeza justificada. Ni a las lágrimas de amor, mientras sean de amor. Yo no me opongo al odio, si se explica por si mismo. Ni creo que matar, meresca eternas condenas. Yo no ofresco ni barbaridades ni fantasías. Ni me vendo por un par de monedas de oro. Yo no creo en dioses apilados, en los libros de una capilla.
Ni quisiera llegar a caer en la mentira del amor eterno, ni pretender vivir de los huevos de oro de una gallina de cuentos. Yo no creo en las realidades paralelas, creo en la fantasía y la imaginación. Ni pienso que morir por amor sea el mas dulce de los fracasos.
Yo pienso que nada de lo que se dice es absoluto. Que no existe la verdad entera y teologal. Yo pienso que el amor no es una casa, un perro y cuatro hijos. Yo creo en la intención y la honestidad. Yo no creo en almas gemelas, pienso que se ¨agemelan¨ con el pasar. Yo no creo que ¨querer sea poder¨, creo mas en la casualidad que en la misma voluntad .
Yo no hago estrategias de batalla, si a mi contrincante lo quiero bien. Yo prefiero el amor, y no la guerra. La justicia a la imparcialidad. Yo no quiero vivir cronometrada. Ni con miedo, ni sin risa. Yo prefiero ver crecer a mis hijos, y no acciones que cotizan. Yo estoy en edad de merecer, de merecer el amor de alguien. Yo estoy buscando, buscandole un sentido, a esta vida errante...¿?.

Grados bajo cero

De anoche me hubiese llevado el espejo del techo, con todas esas fotos adentro...

A quien le importa si las nueces en el corazón se pudren, se envejecen. Si las venas maltratadas y malheridas, se funden en un corazón de hierro templado. Vacío, como la música ordinaria de un hotel de paso. Cualquiera fuera la razón, los acoples del sonido fueron tan fuertes que no pudieron oirse sus palabras. Todo era vacío y trivial. Igual que siempre, solo que antes no me había dado cuenta. El frio era físico y mental. Las palabras se caían redondas por la cama. El agua de su espalda era del deshielo de un témpano terrible y rotundo.
Sus ojos de ¨caramelo media hora¨ se habían congelado en mi. Mi mirada era acusadora, juiciosa y definitiva. Nadie entendía nada. Mientras el tiempo pasaba por debajo del puente de la nostalgia, porque TODO, ya había pasado. Y todos los minutos pasan siempre por ahí. Un viento helado, glaciar, difundía sus torpes expectativas sobre una noche bataclana y efímera. Yo no quería, juro que no quería, pero pasó. Pasó lo horrible, lo mas temido. Pasó que se convirtió en hielo el calor. Pasó que solidificó el sudor, y que amanecieron con resaca los días del verano. Y las sábanas no lograban desatar los nudos de mi garganta. Y los espejos no pudieron callar el silencio, que por cierto aturdía. Y la cama se convirtió en un témpano, y las luces avioletadas confundieron nuestros cuerpos con otros. Se transmiten por ósmosis los sentidos, cuando no conducen a nada. Se ignoran, cuando son profundos e innatos.
Sientese en la cama, venga ami lado. Ami me quedan unos grados de calor para abrazarlo y compartir con usted el latir de mi pecho. No se confunda. Tampoco es amor del puro, le digo en un tono de misteriosa reflexión. Pero no me cree. Y me saluda desde la puerta con un gesto duro, inflexible y se va. Yo sé que va a volver. No sé porque motivo siempre vuelve. En realidad, no sé porque motivo siempre se va.
El se baña y yo no lo miro, sé que eso le molesta. El agua recorre su espalda como una catarata de sueños apunto de convertirse en pesadillas. El aire es tenso, las cosas cambian, pienso mientras fumo un cigarrillo. Nada tan inherente a la realidad como los segundos cautivos en las horas.
Que pasó en tu vida? - Nada, la vida me pasa a mi.

Cada cual verifica la temperatura de su alma. Y sentir que nada se mide con el termómetro del pasado, puede ser un tanto tremendista...pero si se sacuden las piernas, con el ruido de un motor, y el calor de un tibio sol, enarbola un pasado de cuento, de fábula de Esopo, eso significa que todavía no alcanzó mi alma, el cero absoluto.

jueves, julio 21, 2005

El reencuentro

¨....somewhere over the rainbow...¨ Aguante Ray!!.

El reencuentro es con vos!, blogg querido de mi corazón!!!. A vos que tanto te extrañé todo este tiempo sin computadora!!!, que tanta falta me hiciste durante estos días huracanados que estuvieron alterando la parsimonia habitual de mi vida!.
Acá estamos los dos. Vos de aquel lado, leyendo, yo de este otro, escribiendo.

Estos ultimos días fueron un tanto arremolinados. Son las épocas claves, después de las cuales podré decir que hubo un antes y un después de aquellos días memorables. No muy satisfactorios, pero memorables en definitiva.Cambio de gente en el trabajo, cambio de funciones, cambio de horarios y de sueldo (posiblemente). Los dinosaurios están abarajando la posibilidad de extenderme la condena.
Así es. Pasó el día del amigo...pasó de largo...
NO pude hacer los regalitos que tenía pensado hacer. Estoy sumamente preocupada porque tengo miedo que estos nuevos vientos de cambio se lleven algunas cosas...
Mas horas de trabajo, menos tiempo para estudiar. Un trabajo extra que no me aporta nada y me hace sentir terriblemente pelotuda. Ni media espalda masculina donde apoyarme. Los días son tan cortos...y tan largos a la vez. Tengo mucho miedo de caer en la monotonía, de la rutina aburrida. Ir a trabajar, volver a mi casa y estudiar y acostarme a dormir, para volver a levantarme y así sucesivamente hasta que me jubile. Por dios!, eso me da pánico.

Me voy a dormir, me tengo que levantar temprano para llevar a cabo la rutina mia de todos los días!!!.

martes, julio 12, 2005

El día que mi boca...

Tan seguido como aveces. El sonido contundente de un mensaje que alguna vez fué para mi. Porque un sonido, o bien una melodía o el aroma fresco de las mañanas de verano me transmiten mucho mas que una sensación. Me transporta hacia el abismo de la inconstancia y el desatino. Después de haber pasado reiteradas veces por el mismo camino (que circunda una misma esencia), me vuelvo mas impertinente e inoportuna. Después de haber perdido el sentido de la visión a corto plazo. Y de haber generado cuentas a pagar en el futuro, el futuro lejano que ya llegó. Insoportablemente acorralada en la penumbra de una calle vacía, de una vereda levantada por las raíces de un palo borracho.
El sonido del timbre me retrotrae a la madrugada de un día, ninguno en especial, porque todos eran especiales. Los días de hoy son ordinarios y triviales, sobre todo triviales. Padesco la enfermedad de la rutina crónica. La enfermedad de las camas y las alcantarillas. La insensatéz de las horas maldecidas y trastocadas por el suspiro de las palabras que arden por el calor de una llama incolora y fugáz. Si la tempestad no hizo mas que avivar los fuegos del infierno y apagar el sol....
En el tono de la pobreza y la mediocridad, plantié cuestiones de fuerza mayor a la luz de los reflectores de colores que giraban enloquecidos al ritmo de los cuerpos enardecidos por el fuego de la lujuria. Si, de la lujuria y la frialdad.
Y el aire parió un hijo al que llamó: silencio.
Y su mirada se tornó oscura e irreflexiba, mientras la música dejaba de hacer eco en mis oidos.
Nada es suficiente. Todo es inútil y se convierte en un enorme container de desperdicio. Y entonces a las palabras se las robó un DJ, el día que mi boca no dijo nada.

sábado, julio 09, 2005

Delirium post

Después de haber fracasado tristemente en todos mis intentos de pedir auxilio, recurro a éste, mi primer y ultimo recurso.
Me siento profundamente triste. Tengo muchas ganas de llorar. Estoy tan lejos de todo, y todo es cada vez mas inalcanzable. Me repito a mi misma, siempre las mismas cosas. Me escucho todos los días diciendome las mismas cosas, lanzando las mismas plegarias al cielo. Estoy tan cansada de pertenecer a otro planeta. Mientras tanto sigo esperando la visa de este mundo. Siempre diferente, extraña. Aveces quisiera tener una vida cualquiera, ordinaria y simple. Quisiera ser discreta, en un 100%. No soporto mas ser yo misma. Vivir dentro de un cuerpo que no conosco, y que no quiero conocer. Vive dentro mio, el espíritu de alguien que no se reconoce en nada, ni con nadie. Tan único e inexacto que altera las mismas leyes de la naturaleza. Tan precario, tan sútil y dulce. Volviendome hacia atrás, veo las estatuas de sal que se precipitaron a al escuchar sus nombres. Como los demonios de las alturas que aterrizan sin saber porque en los campos, sembrados de sombras y oscuridades. De penumbras sigilosas y de corazones mutilados, con las carnes pudriendose al sol.
Estoy tan suspendida del aire. Tan falta de una plataforma. Me suceden cosas impalpables, abstractas como el amor mismo. Me encuentro buscando con los pies, un piso, la base de todo esto. Y no hago mas que pisar piedras agudas. Y me hundo, hacia abajo, profundo en las aguas del terror de vivir. Y las ascaleras no hacen mas que conducirme hacia abajo, buscando la esencia de todo esto. Cada vez mas abajo, mas triste, mas absurdo. Perdiendome entre los anzuelos, esquivando los delirios de quienes enloquecen de razón. Buscando siempre algo mas, donde hay algo menos. Es que no sé vivir. No puedo mas, vivir buscando tesoros enterrados hace millones de años. Tengo en la mente pensamientos disléxicos. Tengo miedo de no querer vivir. Tengo miedo de decepcionarme de mi misma. Vivo con el terror de encontrarme, de descubrirme. De abrir las ventanas para que entre la luz de la mañana a reflejarme tal cual soy. De que algún día toquen la puerta los demonios que alguna vez ya pude espantar. De que las cosas no sean tan definitivas como creo.
Mi cabeza está a punto de estallar. Soy tan sólida como el agua y tan concreta como la luz. Es que vivo queriendome dar explicaciones a mi misma. Intentado refugiarme en alguien. En seres invisibles, o de cartón. Hombres y mujeres que no existen y que nunca existieron. Que alguna vez quise materializar. Que pensé adjudicarle su existencia al paso del tiempo. Seres que nunca aparecieron en las calles de este mundo. Que se perdieron con sus vidas por planetas lejanos e imposibles. Seres de madera, de piedra, de carbón. Seres que no se pudren, ni se desintegran.
No se callan. Es mas siembran palabras inconnexas a lo largo de todos los caminos que van formando. Con sus pasos redoblados, fortalecen los acordes de sus melodías. Y buscan por los sembrados campos, la miseria incombatible. Los recovecos de este mundo. Y en un laboratorio de canciones, se detienen a pensar las melodías. Junto a la luz de las estrellas recelosas que se acuestan cuando les advierten la llegada del día.
Tengo ganas de viajar. De volver a donde nunca estuve. De empesar una vida nueva, una nueva yo. Quiero una casa, un trabajo, alguien que me espere y que me vaya a buscar.
No puedo mas seguir intentado vivir con este dolor molestandome en los zapatos. Necesito una resolución, un alivio, un azulejo de agua. Las cosas tienen que cambiar, en algún momento todo esto se tiene que resolver. Siento que la vida no está siendo justa conmigo. Es mas que nada rabia, impotencia. Es sentir que lo que necesito, se escapa de mis posibilidades. Todo esto finalmente queda en manos del destino, de un dios, de un diablo. No sé, es mas que voluntad. Es mas que las cosas inmanejables que manejo. Son absurdas situaciones de las que no puedo hacerme cargo. Barbaridades metidas en el pecho, y la flema de un corazón rasguñado por las pezuñas de un gato sin misericordia y sin dones de gato. La vejez de la ilusión, es tan eterna como maldita. Jamás pude vencerle una batalla a mi fé. SIempre está, intacta, innamovible. Aveces retrocede, pero nunca se da por vencida. Las inquietudes aparece como soles, sin resplandor. Hoy me quema el aire. Las ampollas del alma arden como el fuego mismo en la piel. Y desobedecen ordenes por pura reveldía. Porque la piel no es lo que tira. Ni el olor, ni el perfume. Es todo ese conjunto de hermosas vanidades que lo hacen tan hermoso.

Y nada...

¨...y si te vas, me voy por los tejados como un gato sin dueño, perdido en el pañuelo de amargura que empaña sin mancharla tu hermosura...¨. Que pedazo de canción. Una maravilla.

Hoy también respiro aires de nostalgia. Apenas, un olor amargo, pero suave. Un ruido de motor, que explota, que acelera, y que se va..
Y todo parece tan inalcansablemente lejano, es tan raro haber vivido en los zapatos de otra.
No es la tristeza de haber perdido a alguien, sino de que ese alguien nunca halla existido.

¨...porque una casa sin tí es una oficina, un teléfono ardiendo en la cabina...¨

Es un nudo en la garganta, que nunca se desató. Un secreto, un misterio, el silencio del que no sabe arriesgar. La miseria del pobre, del que no tiene nada para compartir. De la música a la luz de los faroles de una calle a media luz.
De una silla, un mantel, de las cosas que nunca fueron y que nunca van a ser. De todo lo que fué de manera natural y oblicua. De las noches que nunca envejecieron. Del calor, los mosquitos, del parque que refugia a los desamparados.
Mas hallá de las mentiras, de la necesidad innesaria de engañar. Después de haber conocido una de las puntas de la mesa. Y de no saber quien soy, por no saber quien es. De descubrir identidades ocultas. Dibujadas con lápiz sobre un boleto de colectivo. Porque el cemento, los postes, las plazas, todo me conduce a lo mismo. Como casi siempre. Porque los ruidos, tienen un solo origen. Y las noches se desvelan esperandome. No es nada mas que un angustia sutil y pasajera. Una cuestión hormonal y austera, que nada tiene que ver con las....bueno, con eso.

jueves, julio 07, 2005

LUZ, CÁMARA Y ACCIÓN

Lo lindo de nuestras conversaciones por chat era que casi siempre terminaban planificando un encuentro. ¨Te paso a buscar en 30..¨, ¨Te espero en la esquina de siempre..¨. Era muy lindo todo eso, mientras duró. Porque aparte yo no pensaba demasiado en como iba a terminar todo eso. Jamás me puse a pensar demasiado en el destino final de esa relación. Hasta que las cosas empezaron a ponerse feas. De todas formas, en su gran mayoría fué una hermosa relación, mientras duró. Después de que pasaron tantas cosas, y de sentirme engañada como me siento. Mas que engañada, traicionada. Es como si un actor, hubiera aparecido en mi vida, para hacerme vivir dentro de una película, su vida junto a la mia. Termina el rodaje, el actor no es el personaje que representa. Los musicalizadores se van a sus casas, los de las luces apagan todo y se van a dormir. El director, al que nunca ví, termina la última escena de esta grandísima farza y se va. Todos desaparecen y yo me quedo sola, sentada en la plaza de la Independencia, mirando para todos lados, como buscando gente de verdad. No actores.
Ya desmantelaron toda la infraestructura, y ya todos saben que era nada mas que una película, una ficción. Todos, menos yo.
El actor principal, volvió a su vida. La actríz principal, permanece sentada en la lomadita de la plaza que da hacia la 9 de Julio. A una cuadra y media del departamente donde alguna vez lo hicieron bajo la luz de la luna. Nada menos que una oronda luna de verano.
Debo reconocer que hoy lo extraño. Extraño al actor, y no a la persona. Al que me hizo creer que me quería, al que nunca me mintió. Extraño rodar, por las noches de la ciudad. La música, una Coca, una Ser de limón.
Extraño al Germán que no conocen mis amigos. Al que se entregó ami durante un verano maravilloso y fugáz.
Hoy siento una profunda nostalgia, por lo que ya pasó y por lo que nunca volverá a pasar.

martes, julio 05, 2005

Semidepresión premenstrual

Hoy no dejé de pensar en ningún momento del día. No hacía otra cosa mas que relatar verbalmente, lo que quisiera escribir. En este momento no me acuerdo de nada.
Esta mañana tuve un bajón, digamos que pasajero. Me sentí un poco sola en la vida, con un trabajo de mierda, en una situación académica espantosa y sin nadie con quien compartir esa sensación.
Me veo horrible, peluda, blanca, me siento espantosa, un mounstro.

Yo soy la clase de personas que toma una determinación con un tono, en el que parece que va a derribar el mundo para conseguir algo. Y me quedo esperando que el mundo se derrumbe solo, considerando la posibilidad de que las cosas se me den por gracia de dios. Nunca conseguí las cosas por mérito propio, cuando conseguí algo siempre fué por suerte. Cuando hago las cosas de determinada manera, para conseguir un determinado objetivo, me sale todo mal. SNIF. No es porque si, que soy de esta manera y no de otra. Soy así como consecuencia de miles de fracasos consecutivos que me hicieron desertar de la posibilidad de manejar mi destino a mi manera. El destino me maneja ami, soy su marioneta, su disfraz, su hoja en el viento. Es la misma sensación que tratar de luchar contra la aceleración de la gravedad, mas allá del alcance de los brazos. No puedo cambiar nada...a esta altura (y no por la edad). Me siento tan tristemente incompleta.

lunes, julio 04, 2005

El Sr. de mantenimiento

¨...lindo capullo de alelí, si tu supieras mi dolor..correspondieras a mi amor y calmaras mi sufrir porque tu sabes que sin tí, la vida es nada para mi, tu bien lo sabes capullito de alelí. No hay en el mundo para mí, otro capullo de alelí, que yo le brinde mi pasión y que le de mi corazón, porque tu eres la mujer a quien he dado mi corazóny y te juré lindo alelí fidelidad hasta morir.. ¨. Ese hombre debe haber estado muy borracho o muy caliente cuando le juró fidelidad hasta morir..

Mi situación laboral continúa la tendencia en alza que tenía hasta que me enteré esa noticia de cambio de mando y esos asuntos políticos, que en el fondo tan poco me interesan. Todo OK.

Apesar de que hoy tuve una especie de bajón autocensurado durante casi todo el día. Y que ¨siete crisantemos¨, se encargó de liberar mi ansiedad maldita durante gran parte de la mañana.
Todavía me quedan algunas ¨resacas¨, por llamarlo de alguna manera. De todas formas estoy satisfecha con mis avances. Hace mas de una semana que no sé nada sobre su existencia en este mundo y me siento, gracias a mi, muy bien.

Claudio es un romántico del siglo pasado. Si tuviera que vestirlo para diagramar de alguna manera su personalidad, lo vestiría con un traje negro, muy elegante y sobrio, un pañuelo en el bolsillo izquierdo y una flor roja en la solapa. Es un amante del cine y de la fotografía. Su próxima inversión (y la que viene planificando desde hace años) es un proyector de películas. Tiene videos de viajes a las cataratas del Iguazú, que quiere volver a ver (¿?). Fotos en blanco y negro, compradas en ferias de antiguedades, que el asegura que estuvieron en museos muy importantes de Francia.
Todas las mañanas habla con una tal Vicky, generalmente en voz baja.
Los jueves y los martes, pide medio kilo de filet de merluza para llevarse a su casa. Creo que nunca se casó.
Vive con su madre, quien posee algunas pocas acciones de la empresa.
Aveces, cuando está de buen humor, habla en italiano con un proveedor. Después se acuerda de que es un hombre serio, y le pide bulones y herramientas.
A Claudio le gusta el patinaje sobre hielo, pero sospecho que no va a ningún espectaculo porque no tiene con quien.

sábado, julio 02, 2005

Nunca confies en....

Capáz que me gustaría saber contar historias. Poder mentirme ami misma acerca de vidas que nunca viví, en otras épocas, en otros lugares.
Capáz que quisiera haber nacido con el talento de saber escribir, y poder traducir en palabras, las imágenes que aterrizan en mi cabeza a interrumpirme la concentración mientras hago cosas poco importantes.

Hace algunos días concebí una teoría. Absurda, como la mayoría de las teorías que pienso. Basadas en ¨nadas¨, tonterías de las que me hago dueña porque vienen ami, como moscas pegajosas.
¨Nunca confíes en alguien que no tiene cara de llamarse como se llama...¨. JAJA. Claro!, hay personas que se llaman: Pablo y no tienen cara de Pablo. Esa clase de individuos (y hay varios dando vueltas) no son transparentes, porque no reflejan ni si quiera lo mas primitivo de su personalidad. Son personas que ocultan.... hasta su verdadero nombre??!. Lo ocultan de una manera singular, porque lo ocultan sin ocultarlo. Bueno, para eso si tengo talento. Para descubrir a esta clase de personalidades cuyo nombre no corresponde a su cara...
Y puedo asegurar, que no son gente de confianza.
Todo esto surgió de alguna manera espontanea, que no recuerdo con nitidés. Pero en realidad, la frase la generalicé después de haberme dado cuenta de algún par de puntos que no voy a desarrollar porque no tengo ganas de ponerme a inventar. La frase orginal era: ¨Nunca confíes en un Germán que no tiene cara de Germán..¨. Después la extendí al resto de la especie humana que tiene la particularidad de llamarse misteriosamente de otra manera, que nadie sabe. Puede ser también por algún desliz de los que eligieron bautizarlo en honor a algún finado, o algún vecino muy querido, o a algún famoso. Esto me haría desertar de la posibilidad de ponerle Joaquín a un hijo mio. Aunque el nombre Joaquín fué el elegido, aún antes de haberlo conocido a Sabina.
Pero una anécdota me hace claudicar de esta posibilidad.
Una amiga mia, cuyo nombre no voy a mencionar por cuestiones de privacidad, tiene un nombre que no es nada común, ella tampoco lo es. Su nombre no podría haber sido mas apropiado. Sin embargo, cuando su padre fué al registro civil a inscribirla, no le puso el nombre que había acordado con su esposa (de la cual se separó después de algunos años...) sino el que él había elegido. En fin. Nada.

Estoy escuchando ¨Marcha Turca¨, todo un milagro. No solo por su belleza, sino por lo que esta pieza de Mozart significa para mi. Yo conocía su melodía, pero nunca supe el nombre. Nunca la tuve, ni en cassette ni en Cd, por eso siempre tuve las intenciones de bajarla de internet, pero siempre sin suerte..
En el teléfono de mi ex chico, casualmente existía bajo el formato de ringtone. Y así conocía el nombre y pude bajarla y disfrutarla, muchas veces seguidas. Cuando algo me gusta, reacciono casi obsesivamente. Como estoy con los nombres hoy!. Primero con los hombres, después con los nombres...

Me siento muy bien ultimamente. Estoy como antes de haberlo conocido, feliz y contenta y sin ganas de estar mal, y eso es lo importante.

SHIT

Como siempre quise (algo sucede en esta página porque veo la mitad de lo que escribo..). Continuo, siempre quise tener poseer algún medio donde relatar mis pensamientos (algo acaba de suceder nuevamente...). Bueno, me voy. Tengo miedo de que mi máquina esté poseída por el espíritu de la mula electrónica.