domingo, mayo 29, 2005

Depresión colectiva...

Hoy descubrí que es mejor deprimirse en equipo.
En un auto, tres tristes personas hacían una ronda de problemas. Una de ellas, era yo. Diferente a las rondas de problemas con mis amigas. Un tanto mas egoista e individual. Parecíamos no escucharnos, solo reconocer el silencio, que era la señal del comienzo del turno para empezar a hablar. Así se fué la tarde. Y pude darme cuenta de lo triste que me sentía. De un tumor no reconocido y no detectado. De sentir el dolor sin saber que es lo que pasa por dentro. De no saber que procesos se detienen y cuales se aceleran. De no entender que es lo que genera tanta inquietud y mal humor. De sentir que es imposible cambiar. Que no hay voluntad, ni para seguir, ni para volver atrás. De estar rodeado de gente deprimida y absorvida por las presiones de la vida. De que el amor sea un horizonte cada vez mas lejano e imposible. De que la facultad sea una piedra en el zapato. De que el trabajo sea una obligación y una fuente de dinero. De que nadie esté para escucharme lo que digo. De sentirme cada día mas incomprendida y oscura. De que no halla retorno en el amor que siento. De que hablarle a una pared, me duela mas que hablar sola. De que no halla motivo para sentirme bien. De que no halla ni una gota de aire puro en el aliento de las personas. De que la maldad y los malos sentimientos, sean cada vez mas comunes. Hoy me dí cuenta de muchas mientras me deprimía en equipo....

0 Delirios ajenos:

Publicar un comentario

<< Home