sábado, marzo 11, 2006

Revelando un negativo

18 horas en la ciudad de Córdoba. Calor, mucho calor.

Negativo.
Voy en el colectivo que es particularmente una ''catramina'', va lleno y pareciera que va a desarmarse en cada curva. En el fondo del colectivo estoy yo. Transpirada, con los pies sucios, con grasa y mojados. Estoy despeinada, fea, sucia. Llevo mi bolsito cruzado, una campera de jean (para el clima nunca tengo puntería) y 4 sobres que pesan aproximadamente 15 kilos cada uno. Me caigo, me tambaleo, no tengo de donde agarrarme (de los caños de arriba no puedo por que tengo dos cepillos en las axilas).

Plaza España.

Positivo.
Ella va espléndida por la calle, con su blusa liviana de bambula cara. Con su cartera dorada que vale mas que todo lo que yo tengo puesto. Con su pelo de princesa, luciendo un marido que va por la vida tan espléndido como ella. Ella independiente, con su panza de embarazada joven: su panza redonda y bella como la vida misma.

Nos cruzamos en un punto. Ella y yo. Ella, viviendo una vida éxitos. Yo....bueno, yo.

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