Lluvia
La vieja abre la puerta y ahí estoy yo: parada en el umbral de su casa, mojada y con cara de opa. Camina unos pasos para atrás, me apunta con la escoba y me dice enojadísima: ¿QUÉ HACÉS VOS AHÍ?.
Yo la miro con mi más auténtica cara de mala y me voy.
Todavía no sé si se trataba de una vieja con cara de reptil, o de un reptil con cara de vieja.
Yo la miro con mi más auténtica cara de mala y me voy.
Todavía no sé si se trataba de una vieja con cara de reptil, o de un reptil con cara de vieja.
5 Delirios ajenos:
Aquí también llovió hoy. No tuve la mala suerte de toparme con híbridos de anciana y reptil, pero sí con muchísimos gilipollas con coche y permiso de conducir.
A veces me pregunto cómo es posible que no sucedan más desgracias.
Me alegra ver que sigues escribiendo ;)
¡¡¡¡¡Hooooooooola!!!!!
¡¡¡¡Tanto tiempo!!!!
Había perdido la dirección de tu blog.
Qué alegría que me diste. No sabés...
Besos.
Que manera de llover y hacer frio. Me recontramojé.
Hoy estaba para quedarse en la cama, haciendo cucharita y/o mirando una película.
Poné la dirección de la vieja y nos vamos todos los lectores a cascotearle el rancho.
Dónde fuiste, querida?
Jajajajaja, vamos Danir!, vamos a cascotearle el rancho a a vieja..jajaja.
No sé si vas a leer esto, pero anoche soñé con vos, con Sarah y con Óscar. Estaban muy bien.
Besos.
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