martes, septiembre 26, 2006

Fantasia

Abrimos la puerta los dos al mismo tiempo: él quiere entrar y yo quiero salir. Mi cabeza queda justo a la altura de su pecho (¿porqué siempre huele tan bien?). Respiro profundo y rápido para sentir su olor pero sin que se de cuenta.

- Eeee...nena...fijate por dónde andás.

- Jajajaja (risa tonta).

Él sigue su camino y yo el mio. Camino sin mirar por donde voy, por que lo único que tengo en la cabeza es una fantasía que aflora cada tanto: él y yo en el baño que tiene el botiquín medio salido. El me agarra fuerte de la cintura y me lleva hasta ahí. Y bueno...y pasan cosas "guarras". Salimos como si nunca nada hubiera pasado: como sería si eso pasara en mi mundo exterior.

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