Parca
Antes era una gorda fea blanca y peluda. Ahora soy una gorda fea blanca peluda y enferma.
Estar enferma me hace sentir vieja. Me dá miedo. Imagino que estoy en terapia intensiva conectada a un respirador del cual depende mi vida, y la gente se amontona para visitarme. Algunos lloran. No puedo creer que esas personas estén ahí: gente del trabajo, amigos, familia. Entonces lloro, voy en el colectivo y lloro pensando en que la muerte anda cerca. Que me empieza a espiar y que me sigue. Y lloro de miedo, por que me da miedo todo lo desconocido, no por que tenga muchas cosas que hacer en este mundo y si me muero hoy quedarían incompletas. Ni por que hallan personas que dependan de mi para vivir o para ser felices. Ni por que viva luchando por causas justas, o amparando desamparados, o alimentando a los desnutridos, ni curando enfermos, ni salvando ballenas en un barco de greepeace, ni nada por lo que valga la pena vivir.
Estar enferma me hace sentir vieja. Me dá miedo. Imagino que estoy en terapia intensiva conectada a un respirador del cual depende mi vida, y la gente se amontona para visitarme. Algunos lloran. No puedo creer que esas personas estén ahí: gente del trabajo, amigos, familia. Entonces lloro, voy en el colectivo y lloro pensando en que la muerte anda cerca. Que me empieza a espiar y que me sigue. Y lloro de miedo, por que me da miedo todo lo desconocido, no por que tenga muchas cosas que hacer en este mundo y si me muero hoy quedarían incompletas. Ni por que hallan personas que dependan de mi para vivir o para ser felices. Ni por que viva luchando por causas justas, o amparando desamparados, o alimentando a los desnutridos, ni curando enfermos, ni salvando ballenas en un barco de greepeace, ni nada por lo que valga la pena vivir.
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