Sexo oral
El giraba en la rotonda de mis piernas,
se perdía,
con las manos las separaba suavemente.
Yo me abría como una flor,
Y él metía su cabeza.
Su lengua y mi clítoris agradecido,
bailaban un valcecito francés.
Perdía la noción del tiempo,
(perdíamos la noción del tiempo)
y después,
yo pasaba mi derecha por encima de su cabeza,
mientras le decía lo más educadamente posible: ya está.
se perdía,
con las manos las separaba suavemente.
Yo me abría como una flor,
Y él metía su cabeza.
Su lengua y mi clítoris agradecido,
bailaban un valcecito francés.
Perdía la noción del tiempo,
(perdíamos la noción del tiempo)
y después,
yo pasaba mi derecha por encima de su cabeza,
mientras le decía lo más educadamente posible: ya está.
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