sábado, noviembre 25, 2006

¿¿??

Anoche,

vivía con mi familia en Bariloche.



Teníamos una casa muy fea, sin pintar, sin revoque.

Vivíamos al frente del lago "Machu Pichu", conocido fuera de mi inconsciente como "Nahuel Huapi".

A mi mamá no le gustaba vivir ahí: era infeliz.

- ¿No sos feliz viviendo acá?.

- No, yo quería vivir cerca del mar.

- Pero si estamos al frente del lago argentino ¡no te podés quejar!

- Pero yo no quería vivir acá, yo quería vivir al frente del mar.

- Aparte este no es el lago argentino - me autocorregía - este es el "Machu Pichu".

Mi papá se tomaba un tren (o un colectivo) y ahí se encontraba con Mónica Gonzaga.

Se la estaba cogiendo en esos espacios que existen entre vagón y vagón, sobre una mesa donde había una torta a medio comer, cuando entró él:



Un poco menos violento que el de la película, pero también tenía lo suyo. Era chileno. Al verlo, Mónica Gonzaba se vestía rápido y se iba. "Begbie" se quedaba con mi papá y le decía:
- ¿Cómo hiciste para cogerte a esta minita?. Mirate - le decía despectivamente

Y mi papá se miraba el pichulín.

Si lo pienso bien, no sé que hacía yo ahí metida. No sé si veía todo como espectadora, o andaba escondida en el tren.

Y no me acuerdo de más nada.

0 Delirios ajenos:

Publicar un comentario

<< Home