Salamín de la colonia
Tipo afeminado. Afeminadísimo. Pero no solamente eso. Encima es falso, salamero, adulador. Pero por una de esas vueltas de la vida, tengo que hacer parte de mi trabajo con él. No me queda otra.
- ¡Qué bueno Maia, vamos a trabajar juntos!. Siempre quise trabajar con vos, por que siempre me pareciste una mina re re re re re inteligente. Y sé que los dos vamos a aprender mucho con todo esto. Mirá: cuando te recibas, yo te voy a llamar para que trabajes conmigo ¿si?. Pero no le digas a nadie. Vas a ver que vas a sacar un montón de guita trabajando conmigo. De verdad, Maia. Creeme.
- Bueno, bueno. Pero todavía me falta bastante para recibirme. Ahora empecemos con lo que tenemos que hacer que no es poco - le digo tratando de conservar una sonrisa falsa que en cualquier momento se me cae de la cara y se estrella contra el piso -
- Dale hermosa, hermosura, divinura, empecemos.
Primero desplegamos el eterno listado con las cosas que teníamos que hacer. Las transcribí, las organizamos. El muy puto me dió ordenes camufladas diciéndome por ejemplo: "Maia, mi amor. Necesito que le saques fotocopia a éstos informes y me los mandes el lunes a mi oficina..¿sabés hermosa?.
A todo le decía que si con cara de culo.
- ¿Qué pasa Maia que tenés esa carucha de enojada?.
- Estoy pensando. Y cuando pienso pongo cara de enojada - le miento.
Le miento por que me embola que éste tipo quiera hacerme creer cosas que no son. Primero que soy una hermosura y una divinura. Y segundo, que me está haciendo hacer ami cosas que debería hacer él. Loco: es su trabajo. Encima me dice: "Y agradecé que por todo esto no te cobro". ¡¡Es tu trabajo malnacido!! (pienso pero no le digo). En eso nos trabamos. En realidad estamos hasta las manos. Son muchas cosas, mucha plata, mucho trabajo. Cada vez que le pregunto si vamos a hacer algo de lo que tenermos que hacer, me responde: "lo vamos a hacer, entre comillas". Como diciendo: "no vamos a hacer ni bosta".
- ¿Sabés qué?. Lo vamos a llamar al tipo éste que es capo máximo máximo de ahí.
- Bueno, dale llamalo.
- Aparte - y se pone muy serio - él daría la vida por mi. Combatimos juntos en Malvinas.
Y cuando dice ésto no solamente le cambia la mirada. Sino que parece recordar algo. Parte de una historia de hace veinte años atrás. Y yo me imagino al puto éste, vestido de soldado y cagado hasta las patas mirando aterrorizado a un soldado inglés. Y el otro (el capo máximo máximo) saliendo de atrás de un arbusto y matándolo a tiros al soldado inglés. "El daría la vida por mi".
- Mirá - me dice - ya hablé con éste amigo mio y antes de mandar el mail, me tenés que llamar ami para que yo lo vuelva a llamar a él. ¿Entendiste?. No sé por que siempre decís que no sos inteligente. Para mi sos brillante.
- Yo nunca dije que no era inteligente.
- Jajajaja. Bueno che. Entonces quedamos así. Me tenés que sacar fotocopia de los informes, mandármelos y averigüarme todos esos datos que te pedí. Nos vemos la semana que viene ¿si?.
- Dale, nos vemos.
- Chau mi hermosura, mi divinura. No te olvides.
- Chau, chau.
Y se va caminando y moviendo el culo hasta el auto donde supongo que pensará: "que estúpida la mina ésta".
- ¡Qué bueno Maia, vamos a trabajar juntos!. Siempre quise trabajar con vos, por que siempre me pareciste una mina re re re re re inteligente. Y sé que los dos vamos a aprender mucho con todo esto. Mirá: cuando te recibas, yo te voy a llamar para que trabajes conmigo ¿si?. Pero no le digas a nadie. Vas a ver que vas a sacar un montón de guita trabajando conmigo. De verdad, Maia. Creeme.
- Bueno, bueno. Pero todavía me falta bastante para recibirme. Ahora empecemos con lo que tenemos que hacer que no es poco - le digo tratando de conservar una sonrisa falsa que en cualquier momento se me cae de la cara y se estrella contra el piso -
- Dale hermosa, hermosura, divinura, empecemos.
Primero desplegamos el eterno listado con las cosas que teníamos que hacer. Las transcribí, las organizamos. El muy puto me dió ordenes camufladas diciéndome por ejemplo: "Maia, mi amor. Necesito que le saques fotocopia a éstos informes y me los mandes el lunes a mi oficina..¿sabés hermosa?.
A todo le decía que si con cara de culo.
- ¿Qué pasa Maia que tenés esa carucha de enojada?.
- Estoy pensando. Y cuando pienso pongo cara de enojada - le miento.
Le miento por que me embola que éste tipo quiera hacerme creer cosas que no son. Primero que soy una hermosura y una divinura. Y segundo, que me está haciendo hacer ami cosas que debería hacer él. Loco: es su trabajo. Encima me dice: "Y agradecé que por todo esto no te cobro". ¡¡Es tu trabajo malnacido!! (pienso pero no le digo). En eso nos trabamos. En realidad estamos hasta las manos. Son muchas cosas, mucha plata, mucho trabajo. Cada vez que le pregunto si vamos a hacer algo de lo que tenermos que hacer, me responde: "lo vamos a hacer, entre comillas". Como diciendo: "no vamos a hacer ni bosta".
- ¿Sabés qué?. Lo vamos a llamar al tipo éste que es capo máximo máximo de ahí.
- Bueno, dale llamalo.
- Aparte - y se pone muy serio - él daría la vida por mi. Combatimos juntos en Malvinas.
Y cuando dice ésto no solamente le cambia la mirada. Sino que parece recordar algo. Parte de una historia de hace veinte años atrás. Y yo me imagino al puto éste, vestido de soldado y cagado hasta las patas mirando aterrorizado a un soldado inglés. Y el otro (el capo máximo máximo) saliendo de atrás de un arbusto y matándolo a tiros al soldado inglés. "El daría la vida por mi".
- Mirá - me dice - ya hablé con éste amigo mio y antes de mandar el mail, me tenés que llamar ami para que yo lo vuelva a llamar a él. ¿Entendiste?. No sé por que siempre decís que no sos inteligente. Para mi sos brillante.
- Yo nunca dije que no era inteligente.
- Jajajaja. Bueno che. Entonces quedamos así. Me tenés que sacar fotocopia de los informes, mandármelos y averigüarme todos esos datos que te pedí. Nos vemos la semana que viene ¿si?.
- Dale, nos vemos.
- Chau mi hermosura, mi divinura. No te olvides.
- Chau, chau.
Y se va caminando y moviendo el culo hasta el auto donde supongo que pensará: "que estúpida la mina ésta".
3 Delirios ajenos:
que forro.
¿Forro?. Le queda chico el "forro". Jajajajajaja. Dobles sentidos si los hay...
Muy agudo el detalle de transcribir la parte de nuestro héroe en tonos rositas... jeje!
Pero si eres una hermosura divina... sólo que él lo dirá de peloteo, porque seguramente bebe los vientos por el soldado matador de ingleses de las Malvinas...
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